Reforma de pensiones en Perú: pensión mínima para todos, afiliación universal y mayor competencia
Perú dio un paso trascendental en la reforma de pensiones con la publicación del reglamento de la Ley de Modernización del Sistema Previsional Peruano (N° 32123). Este reglamento, fruto de un proceso de consulta con diversos sectores, busca modernizar el sistema de manera progresiva, fomentando una cultura de ahorro y garantizando la seguridad social para todos.
Beneficios destacados de la reforma
La reforma incluye una serie de medidas que busca fortalecer el sistema previsional y ofrecer más opciones a los afiliados:
Pensión mínima garantizada. El reglamento consolida la pensión mínima de S/600, asegurando que ningún jubilado quede desamparado. El Estado se compromete a complementar los fondos de aquellos trabajadores que no hayan acumulado lo suficiente para alcanzar este monto, siempre y cuando no realicen retiros extraordinarios.
Afiliación universal y temprana. A partir de junio de 2027, la afiliación al sistema previsional, público o privado, será obligatoria desde los 18 años. Esto permitirá a los jóvenes empezar a construir su futuro financiero desde temprana edad. Para facilitar este proceso, se creará la Plataforma de Afiliación Segura y Transparente (PAST), una herramienta digital para gestionar las afiliaciones.
Inclusión de trabajadores independientes. A partir de 2028, los trabajadores independientes también aportarán al sistema, lo que les permitirá acceder a los beneficios de una jubilación. Los aportes iniciales serán del 2% y aumentarán al 5% de forma progresiva, hacia el año 2034.
Mayor competencia y mejores opciones. El reglamento abre la puerta a nuevos competidores, como compañías de seguros y bancos de inversión, que también podrán administrar fondos de pensiones. Se espera que esta mayor competencia genere mejores rendimientos y más beneficios para los afiliados.
Ampliación de la cobertura. La reforma incorpora nuevos mecanismos de aportes voluntarios para el fondo de pensiones, como la devolución de impuestos por pagos en exceso y los aportes por consumo.
Además, se fortalecerán programas sociales como Pensión 65 y Contigo para beneficiar a los adultos mayores y a personas en situación de vulnerabilidad.
Inclusión de trabajadores informales que «pueden definir la frecuencia y el Ingreso Mensual Asegurable (IMA)». A diferencia de los trabajadores formales que aportan cada mes de manera regular, los informales pueden decidir con qué periodicidad van a aportar a su fondo de pensión. Por su parte, el Ingreso Mensual Asegurable (IMA es la base sobre la cual se calculará su aporte. El trabajador informal no tiene un salario fijo, por lo que él mismo debe declarar cuánto de su ingreso va a destinar para la pensión.
Los efectos negativos de los retiros extraordinarios
Aunque la idea de un retiro extraordinario de fondos pueda parecer atractiva a corto plazo, el ministro de Economía y Finanzas, Raúl Pérez Reyes, ha sido claro al respecto: el gobierno no respalda esta medida. La ley actual no la contempla y cualquier iniciativa en este sentido sería observada por el Ejecutivo.
La prohibición de retiros se basa en un principio fundamental: la seguridad financiera del afiliado a largo plazo y la estabilidad del sistema previsional. Un retiro de fondos tiene consecuencias graves:
Pérdida de la garantía estatal. Un afiliado que realice un retiro extraordinario perderá el derecho a la pensión mínima de S/600. Con una gran parte de los afiliados con saldos bajos en sus cuentas (más de 6 millones con menos de S/5,000), un retiro de fondos podría dejarlos sin posibilidad de acceder a una pensión al momento de jubilarse.
Efecto negativo en la rentabilidad. Los retiros extraordinarios reducen los saldos en los fondos de pensiones, lo que disminuye las posibilidades de generar mayores rentabilidades a lo largo del tiempo.
En resumen, la reforma busca un sistema previsional moderno y sostenible. La prohibición de los retiros extraordinarios, lejos de ser una medida restrictiva, es un pilar clave para asegurar que los peruanos puedan disfrutar de una pensión, con el respaldo del Estado.